Llega marzo y con este mes
comenzamos las actividades escolares. No sólo los niños y jóvenes inician sus estudios regulares.
Ciertos adultos, también lo hacen. Y una de las actividades de
aprendizaje que cada vez más realizan los adultos es aprender una nueva
lengua.
Hay muchas razones para aprender
otro idioma. Las razones laborales y de
imperiosa necesidad geográfica (como mudarse a otro país) son frecuentes; sin
embargo, la mayoría de las personas adultas que deciden estudiar un nuevo
idioma lo hacen por inquietudes culturales (viajes de placer, intercambio
cultural, leer autores en lengua original, gastronomía, artes, etc.).
Hoy, la influencia de la
globalización hace que vivamos estrechamente conectados los unos con los
otros. Por eso, una segunda, tercera o
cuarta lengua se hace indispensable. El idioma es una herramienta que
supera los límites del campo laboral y profesional. Una nueva lengua es imprescindible para la
vida cotidiana.
Me cuentan los alumnos adultos
que el Francés (que es el idioma que yo enseño) les sirve para comunicarse en
las redes sociales; para extender las fronteras culturales y relacionales.
Según ellos, el aprendizaje del Francés
les dio independencia y rapidez al momento de buscar información de interés.
Otro cambio social en materia de
aprendizaje de idiomas es que, hace algunos años, se aconsejaba estudiar una
segunda lengua, mientras que hoy las personas no se contentan ni con la primera
ni con la segunda. Van por más y de las
más exóticas.
Mi experiencia en esta materia
me permite aseverar que los adultos aprenden mucho más rápido que los
adolescentes, por ejemplo. La motivación
de realizar viajes, conocer países y sociedades diferentes es de una gran
ayuda. Por otra parte, no hay límite
de edad para aprender nuevas lenguas y desarrollar esta atractiva habilidad.
En la actualidad, ya no se
considera una pérdida de tiempo estudiar idiomas. Al contrario, se considera
una inversión para el espíritu porque enriquece nuestra vida cotidiana. Un
idioma nuevo permite además experimentar nuevas ideas y ejercitar la mente. No
olvidemos que al aprender una lengua diferente a la materna, el cerebro se
expande, trabaja, se esfuerza y se ejercita como cualquier músculo de nuestro
cuerpo: es importante para nuestro agilidad mental y para conservación de la
memoria.
En síntesis, aprender otra lengua
es importantísimo para tu vida.
Mi experiencia con los idiomas me
hace reconocer un nivel de popularidad entre estos. Los más estudiados y empleados son en la
actualidad los siguientes: Inglés, Francés, Italiano, Chino Mandarín,
Portugués, entre otros.
Lo que
puedo comentar sobre el Francés, después de 37 años de contacto, es que el
Francés es una lengua que se habla en los cinco continentes. Se estima que
hablan el Francés más de 200 millones de personas en todo el mundo. En buena
parte del mundo es, además, la segunda lengua que se estudia en el colegio por
excelencia. El Francés es una gran puerta a la cultura y al mundo.
Oscar Fernández
Periodista y prof. de Francés
Vecino de Villa Ballester
Mail: correosscar@gmail.com
Muy buena nota. Es muy importante aprender idiomas. Hasta que no lo necesitás imperiosamente y en forma obligatoria no te das cuenta.
ResponderEliminarGracias por el comentario. Totalmente de acuerdo.
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